te espero

Te espero

 voy lamiendo tu regreso

saboreando la dulzura de tus senos

luz de luna que amamanta mi sustento

de latidos que se suman a mis ecos.

 yo te espero

         imagino que recorro tu sendero

junto flores que suspiran por tu aliento

y trinares juguetones que aletean en el viento.

yo te espero

         desde verme reflejado en tus espejos

         mucho antes de enredarme en tus cabellos

         más allá de las tormentas y el desierto

         por los mares, en las selvas o en el cielo

         cuando rio, cuando lucho,

                           cuando muero!

El Muro

Había una vez un muro

generoso en argumentos

desde “salvar las ballenas”

hasta “marcianos sin cuento”

daba lugar este espacio

veinticuatro horas abierto

libre y gratuito, por cierto

aunque no tan inocente

como muchos lo pretenden.

Yo digo que el muro es muro

porque ahora he descubierto

que el verdadero elemento

que encierra tamaño “invento”

no es compartir novedades

sino esconder a los lobos

que esperan caperucitas

que quieren que las atrapen

jugando a las escondidas.

Un muro siempre es un muro

y la red es una trampa.

La novela de Paul Sartre

“the wall” o la Gran Muralla

de púas  o de cemento

de estupidez o maldades

el muro de los lamentos

el de Berlín o el de “facebook”

son pan de fusilamiento.