Nunca lloro por los otros
nunca ayudo porque sí
si perdono, no me olvido
si me mudo es porque escapo
si me quedo, estoy cobrando…
y tú crees que yo sirvo a los demás!
Día a día prodigo que vivamos sanos
hasta el final
que nuestro envase garantiza
90
años o más…
Pero el precipicio me invita a volar
y cabalgo las cornisas
y me zambullo en el vicio
de
volver a amar!
Me embriago todo el tiempo
de belleza que no logro
ni copiar
y tú dices que yo sirvo a los demás!
Caigo tanto, tanto
que si
no fuera por ustedes
no podría continuar
Y tú lo sabes
y
tú lo sientes
y tú me vuelves a levantar!