Deberían llamarte María
para que tu manto
largo hasta tus faldas
no sólo coincida
con tu erguida estampa
de contorno en gracia
sublime y altiva.
Deberían llamarte María
para que la España
te haga su cautiva
para que tus tacos
den ritmo a la danza
de rectas espaldas
y mirada herida.
Deberían llamarte María
como a la paloma
o a las de la Biblia
ningún otro nombre
podrá recordarte
con tanto misterio
verdad y poesía.
No hay comentarios:
Publicar un comentario